miércoles, 14 de septiembre de 2011

REFLEXOLOGÍA PODAL


¿Qué es la Reflexología Podal?

La Reflexología o Reflexoterapia Podal es una técnica que consiste en la aplicación de presiones en puntos específicos, zonas y áreas reflejas de los pies.

El término reflejo indica un fenómeno que aparece, con carácter involuntario, en forma de respuesta motora, secretora, etc., frente a un estímulo determinado, como consecuencia de una especial actividad del sistema nervioso.

Zonas reflejas, son por tanto, partes de nuestro cuerpo que se comunican entre sí a distancia, a través de diversas conexiones nerviosas.

La Reflexoterapia Podal está encuadrada dentro de las denominadas Terapias Naturales, Holísticas o Manuales, en el campo de la Medicina Natural. Po lo que el concepto de la misma el global, en oposición a la concepción convencional. La última, trata de especializarse cada vez más en sistemas fisiológicos separados. Mientras que las terapéuticas reflejas, contemplan todos y cada uno de los sistemas, teniendo presente su interconexión con el resto. Tratando de armonizar todos, cuando en alguno de ellos se presente alteración. Ya que cualquier anomalía en uno de ellos, por pequeña que sea, implica o compromete el buen funcionamiento de los demás sistemas.

Esto se evidencia claramente cuando exploramos unos pies, no importa que órgano sea el que manifiesta una dolencia con mayor claridad, siempre encontramos zonas sensibles que corroboran la existencia de anomalías complementarias o secundarias a la que originó el factor de alarma en nuestro organismo.

La Reflexología es un método para activar los poderes curativos del cuerpo. Un método moderno y a la vez antiquísimo. A partir de viejos textos, ilustraciones y obras de arte, sabemos que los antiguos chinos, japoneses, indios, rusos y egipcios trabajaban el pie para proporcionar buena salud. En la actualidad, muchas de aquellas técnicas han sido desarrolladas en un moderno método científico llamado reflexología. El nexo común entre aquellas doctrinas antiguas y las teorías modernas es que hay zonas de energía que recorren el cuerpo humano formando áreas reflejas en el pie, las cuales corresponden a la mayoría de los órganos, glándulas, funciones y zonas anatómicas del cuerpo.

¿Quiénes pueden recibir el tratamiento?

En general todo el mundo puede recibirlo: niños, adultos, ancianos, pasando por todas las etapas del crecimiento, ya que en cada momento de nuestra vida podremos ayudar a normalizar y equilibrar nuestro organismo, la persona sana encontrará en la Reflexología una forma de prevenir y mantener su salud, la persona enferma irá progresivamente recuperándose de sus alteraciones y bloqueos, mejorando su calidad de vida y consecuentemente su estado anímico.

También es importante resaltar que las emociones rigen nuestra salud, pues está comprobado que el 90 % de las enfermedades tienen una raíz en el estado de ánimo, desde el estrés, pasando por cualquier tipo de situación por la que esté atravesando la persona, la reflexoterapia nos ayudará a mejorar y cambiar pautas de comportamiento adquiridas desde la infancia que son las que nos están llevando al desequilibrio.

Indicaciones

La terapia está indicada en toda clase de alteraciones físicas, psíquicas y motoras o sensitivas. Incluso en los casos donde no hay un problema concreto, ayudaremos a mantener el equilibrio físico y emocional para ayudarnos a superar las situaciones a veces estresantes de la vida.

Efectos beneficiosos del tratamiento

Los efectos que podemos conseguir son numerosos, vamos a destacar los más sobresalientes, aunque debemos tener en cuenta que la sensibilidad de cada persona es distinta, así como el tipo de problema y su mejoría dependerá también del tiempo que hace que se generó.

-Induce a un profundo estado de relajación y bienestar.

-Estimula la energía vital. Libera los bloqueos existentes y la hace circular de forma equilibrada.

-Mejora la circulación sanguínea y linfática, a nivel local y general. Evitando que existan estancamientos de sustancias o residuos de desecho en los tejidos.

-Equilibra las transmisiones nerviosas. Produciéndose un perfecto ajuste del sistema de retroalimentación e interconexión entre todas las partes de nuestro organismo, contribuyendo a mantener el medio interno en perfectas condiciones: Homeostasis.

-Depura y limpia el organismo de sustancias tóxicas como catabolitos, calcificaciones, ácido láctico, uratos y materiales de desecho procedentes de la respiración celular.

-Favorece la respiración y nutrición celular.

-Reduce la tensión y la ansiedad.

-Normaliza las funciones orgánicas, glandulares y hormonales.

-Estimula las defensas del organismo, provocando una mayor actividad del sistema inmunológico.

-Alivia el dolor.

-Reduce el estrés e induce a la relajación profunda.

-Mejora la circulación.

-Limpia el cuerpo de toxinas e impurezas.

-Equilibra la totalidad del sistema.

-Revitaliza la energía.

-Es una técnica preventiva.

-Estimula la creatividad y la productividad.

-Alimenta la amistad.

-Gratifica al que la practica.

En los estados depresivos o en momentos de decaimiento emocional, nos ayudará a recuperar fuerzas y a aceptar y comprender las situaciones que en un principio se presentan como negativas, pero que son, al fin y al cabo oportunidades de aprendizaje.

Tratamiento

La duración del tratamiento es entre una hora y una hora y cuarto.

Precio por sesión 33 €